UN PAÍS PARA CAGARSE

La inspiración literaria, uno nunca sabe cuando le aparecerá, y ha sido paradójico, por decirlo finamente,  el momento y el lugar que ha decidido la “musa escritura” alumbrarme con su sabiduría. Esto ocurrió cuando estaba… como lo diría yo, cuando me disponía a… a irme patas abajo, a defecar… ¡A cagar coño! Lo siento, me he dejado llevar.

Sé que es grotesco y hasta de mal gusto explicar ciertas cosas a la concurrencia, y que lo podía haber omitido sin más. Lo sé. Pero, si aún no han dejado de leer; caca, culo, pedo pis… entenderán el porqué de semejante ocurrencia soez.

Todos aquellos blogueros que nos dedicamos a escribir por hobby, por afición o para desatar nuestros demonios internos, tenemos momentos más o memos intensos y productivos dependiendo de muchas variables; familiar, emocional, laboral, etc.… y yo actualmente, me encontraba en uno de esos momentos de baja intensidad productiva. ¡Qué se le va hacer!

Y miren por dónde, Doña Inspiración apareció cuando menos se la esperaba, en el wáter… pero no en cualquiera, en el mío; uno limpio, coqueto y con un olor a Nenuco que tira patras. Y Allí, en la reluciente poltrona y después de un último pedete indeciso, se me iluminó la bombilla aclarándolo todo. Era el único lugar con el contexto adecuado para semejante marrón…

Tras esta “breve, cálida y perfumada introducción”, ustedes (los valientes que siguen leyendo), se preguntarán; “¡Qué cojones de ondas hercianas le habrán consumido las neuronas a éste tarao!” Pues muy simple señores/as; la Inmundicia y bajeza moral que rezuman las palabras de nuestros pedorros gobernantes, cada vez que abren su pestilente boca. Novedoso verdad.

                                    

Pues sí. La flatulencia que me acompañaba en esos momentos solemnes, no era solamente estomacal ¡Ojalá! Era también emocional, espiritual y visceral... Porque las chabacanerías y soplapolleces que destilan la oratoria mezquina de nuestros gobernantes políticos, habían llevado a mis cortas entendederas, a rebasar los límites de ofuscación que cualquier bípedo con pulgares pueda soportar.

Vivimos en el país del emponzoñamiento viral. Del absurdo. Del a ver quien la suelta más gorda. Vivimos en un país podrido, falto de orgullo y de decencia… donde nuestros dirigentes, o bien no tienen ni un ápice de ética y moral, o bien son unos malnacidos que les importamos una mierda esos a los que tienen que servir.

                                      

Lo siento, me he puesto trascendental… seguiré hablado de “Cacafonias”… ¡Pues no he oído yo! con estas orejotas que limpio con esmero con los algodoncicos;

• “¡Qué somos la nueva locomotora de Europa!”.

• “¡Qué estamos capacitados a plantar batalla al desempleo!”.

• Qué gracias a la bajada de PPantalones del gobierno ante la Merkel, el FMI y el BCE (lo que va siendo la TROIKA), éstos nos colocarán a “Teleñeco de Guindos” y “Yogurín Cañete” donde se merecen… ¿?

• “¡Qué es vergonzosa y criminal la actitud corrupta de Jordi Puyol y allegados… y que actuarán con total contundencia ante actitudes tan reprobables…!”

• “Qué la elección directa de los alcaldes contribuirá "sin duda" a acercar la política a los ciudadanos, pues gobernarán aquellos que son elegidos por los votantes y no aquellos que son designados de manera "opaca" en los despachos”.

Perdón ¡¡Buaaaargh!! Disculpen. Ésta vez no llegue a mí inmaculado baño para vomitar como se debe; con la cabeza gacha y sin falso glamour que enmascare las arcadas que me provoca ver cómo mis gobernantes me humillan y se cachondean de uno sin ningún rubor. Sin ninguna decencia.

Solo espero y deseo por nuestro bien; que el "hijoputismo" que edulcora todos los días una realidad de mierda, acabe por rebasar las cloacas fétidas en las que se ha convertido el PP, y se ponga fin de una puñetera vez a tanta miseria humana que salpica peligrosamente al resto... también a nosotros los ciudadanos. Cuidado.

                               

Algún alma cándida me puede sujetar la frente…¡¡Buaaargh!!

Oscar Ara.